Gasthof Wimmer Eisenstadt

Reseña de un crítico de hotel

Recientemente tuve la oportunidad de alojarme en el Gasthof Wimmer, un lugar con un encanto especial en Eisenstadt. La habitación era amplia y cómoda, aunque carecía de aire acondicionado, lo que hizo que las noches fueran algo calurosas. Afortunadamente, la limpieza era impecable, un detalle que siempre valoro. Al llegar, encontramos un ambiente un tanto confuso, ya que no había señalización clara y tuvimos que buscar la entrada correcta. El hecho de que el restaurante estuviera cerrado el sábado fue un inconveniente, ya que tuvimos que desplazarnos unos 3 km para encontrar algo para cenar. Sin embargo, hay muchas rutas de senderismo y ciclismo en la zona, lo cual sería perfecto para aquellos que disfrutan de la naturaleza, ¡y siempre se podría compensar con una buena excursión al aire libre! El desayuno disponible, aunque sencillo, fue una buena forma de comenzar el día. Además, el acceso a WiFi gratuito en las áreas públicas fue un punto a favor, lo que permitió que mi acompañante y yo nos mantuviéramos conectados mientras explorábamos los alrededores. Una experiencia que, aunque tuvo sus altibajos, tiene un gran potencial para quienes buscan tranquilidad y naturaleza en un entorno acogedor.